N i e t z s c h e y el fin de la tragedia
En sus postulados sobre Sófocles Nietzsche expone
una tesis cuya ferocidad crítica hacia la racionalidad occidental
está ya claramente desplegada.
Denomina el resultado del pensamiento racional y científico como un “conocimiento trágico”, y denuncia su impotencia para descifrar los misterios menos accesibles y enigmáticos del hombre.
Denomina el resultado del pensamiento racional y científico como un “conocimiento trágico”, y denuncia su impotencia para descifrar los misterios menos accesibles y enigmáticos del hombre.
Tal situación, es
solamente soportable por la presencia del arte. Ese planteamiento, sitúa el
contexto del psicoanálisis y el surgimiento de Freud en su justa dimensión para
abordar lo innombrable, el enigma del hombre, el abismo dionisíaco contenido en
el drama individual de los padecimientos del deseo y del goce.
¿Por qué algunas
opiniones filosóficas afirman que la tragedia ha desaparecido?
La tesis de Nietzsche sobre la tragedia es
simple: el pensamiento moderno abandonó la fuente dionisíaca de creación en su
proceso de desciframiento de lo innombrable.
El filósofo alemán denuncia los probables encuentros entre Sócrates y Sófocles. Se reunían y
hablaban y el filósofo influía en dramaturgo y el devenir de la tragedia, para
siempre.
La escena
de ese encuentro es sugestiva, imaginable, verosímil, incluso cinematográfica y aún así, tan
lejana…..Pero no, para Nietzsche ese abandono de lo dionisíaco fue el principio
del fin de la dramaturgia trágica de la antigüedad.
La tragedia fue el
escenario donde dejaron de enfrentarse las fuerzas vitales, la belleza, la
justicia, el heroísmo, el terrible impulso de vivir, la verdad.
Junto con este
abandono de lo dionisíaco se desplazo un principio esencial de individuación
que Nietzsche toma a su vez de Schopenhauer:
“el conocimiento fundamental de la unidad de todo lo
existente, la concepción de la individuación como la razón primordial del mal,
la belleza y el arte como la alegre esperanza, de que se puede romper el hechizo
de la individuación, como el vislumbre de una restaurada unidad”. Nietzsche,
Sócrates y la Tragedia Griega, Biblioteca Nueva, p 169.
La presencia de de estos planteamientos serán determinantes en la filosofía y no han sido ajenos a la tradición filosófica, en pensadores
como Hölderlin, Schelling y Hegel, y retomado posteriormente por autores como
Agamben,o Bataille, cada uno a su manera.
Se
trata de ese principio referido a la tendencia dionisíaca, es decir al impulso
a superar los límites de lo individual y reencontrarse con la naturaleza,
reconciliándonos con ella aunque sea de una manera “desesperadamente
breve” que Bataille propone rompiendo toda atadura reivindicando el
violento goce del extravío.
En síntesis las dos
formulaciones básicas de nietzsche:
1) el abandono
paulatino de la inspiración dionisíaca de la creación artística a partir de
Sófocles.
2) las
consecuencias de dicho abandono en el principio de individuación subjetiva.